Un encuentro inesperado

Madre mía voy a post por día!! Esto tiene que parar jejeje.

Hoy escribo de nuevo pq me han vuelto a pasar cosas que a mi parecer son como mínimo curiosas.

Ayer empecé las clases bien, la primera hora como siempre y como todos los instructores o profesores algo tarde. En la segunda hora tuve 18 chavales de 17 años grandotes, grandotes, que casi no cabían! A veces prefiero que me vengan menos y que estemos todos más cómodos. Pero esto entra dentro de la rutina.

A las 18.30h hacemos el descanso para merendar y la plegaria, y cuando salgo del comedor q tenemos asignado me encuentro con dos cosas increíbles: la primera un silencio inusual en la escuela, la segunda es que la escuela estaba limpia. Aquí no tienen mucha costumbre de usar papeleras, usan más a los paquistaníes, es decir que cuando hacen la pausa para comer son guarros a no poder más, lo tiran todo al suelo o como mucho usan la bolsa donde se les da la merienda para meter los papeles y los resto de fruta y lo dejan en el suelo para que luego un ejercito de trabajadores paquistaníes lo recoja todo a un ritmo soporífero. Este comportamiento lo tienen y eso q en cada campus hay un curso de reciclaje y sostenibilidad!

Que me desvío. Pues salgo de merendar y noto estas dos cosas tan peculiares y al pasar por delante de la sala central del colegio, que es la sala donde se reza, me encuentro a todos los chavales allí dentro con los profesores, donde además han puesto un escenario de corcho blanco llenísimo de regalos! Sin avisarnos, como suele pasar por aquí, la escuela ha parado las clases para repartir premios por buen comportamiento y esfuerzo durante el campus. Así que vivimos una ceremonia de 45 minutos donde a grandes rasgos se repartieron algo así como: 8 memorias usb de 8 Gb, 8 de 16 Gb, 4 discos duros portátiles de 500 Gb, 4 reproductores mp4, 4 Ipod touch, 4 Iphone 4s, 3 Ipads, 2 Ordenadores portátiles, 3 televisiones de 32”, y… ya me acuerdo, 5 cámaras digitales de fotos, y 5 o 6 tablets que no eran Apple y puede q algo se me olvide!!!

Pues sí amigos y amigas, aquí los puntos positivos molan más que allí, pq además esto se volverá a repetir en dos semanas!

Bueno pues acaba la fiesta era la hora justa para hacer la última clase de karate! Se me presentan en la sala tanto los chicos de la tercera hora como los de la cuarta J y cunado consigo aclararme con ellos y saber a que grupo le toca hacer clase llega un niño gritando que el campus se había acabadoL, voy a hablar con el director (que tampoco tenía pensado avisarme) y me dice que los niños están demasiado nerviosos, JA! Lo que pasa es que los maestros no tenían ganas de hacer más clases!

Después de hablar un poco sobre karate con un chico me voy a cenar. Cuando acabo a las 20.20h pienso que tengo dos opciones: quedarme allí tranquilo leyendo hasta que sean las 21h y me venga a buscar el taxista o me puedo salir a la puerta con los chicos que están esperando a que sus padres les vengan a recoger. No sé pq nunca escoja la opción tranquila! Me voy a la puerta y empezamos a hablar de un poco de todo sobre todo de karate y España, el tema deriva hacia las mujeres y como visten, estamos de acuerdo en que Lady Gaga está loca, estamos menos de acuerdo en que Shakira también está loca, q las mujeres españolas visten “libre” y las norteamericanas demasiado “libre”, como si la trampa de un cazador se tratará llegan las preguntas que tendría que haber evitado! Crees en dios? Vas a la Iglesia? Conoces el corán? Tonto de mi intento explicarles que no creo en nada!!! Para luego, por mi bien, rectificar diciendo que soy católico pero poco practicante y que solo voy a la iglesia 2 o 3 veces al año (teniendo que ellos van a rezar 4 o 5 veces al día). De repente me doy cuenta que me rodean como 20 chavales que escuchan a ver que digo sobre la religión, uno de ellos busca en su móvil la versión digital del corán para que la pueda leer allí delante de todos, pero por suerte solo la tiene en árabe (y todavía lo de leer en árabe…) otro chico me dice que mañana (o sea hoy) me lo traerá en castellano y al poco tiempo sale un hombre y los niños le dicen de que trata la conversación, me hace acompañarle a su coche y me regala un cd con el corán cantado o leído melódicamente en árabe. Le digo q no lo entiendo, pero dice que no importa que solo tengo que escuchar, respirar y sentir.

Cuando vuelvo un niño viene corriendo y me dice que le acompañe que me van a presentar a un hombre que habla castellano y que me quería explicar algo. Así que lo acompaño dejando mi mochila de karate al cuidado de los muchachos que hace nada me rodeaban, pasando por delante de una camioneta llena de especias y legumbres y a unos 200m llegamos a una mezquita. El chico entra y al cabo de 30 segundos me pide que entre, me descalzo y… ahí estoy por primera vez y sin pretenderlo dentro de una mezquita.

La mezquita era bastante grande, sin adornos, sin símbolos religiosos, con muy pocas ventanas, con tiras enteras de pared a pared de alfombras verdes donde la gente estaba sentada acabando su rezo. El chico me guía hasta un hombre difícil de describir. Difícil de describir pq aquí se juntan supongo mis prejuicios y lo poco que conozco de esta cultura. La verdad es que cuando lo vi olvidé todo lo que he dicho y todo esto de  los prejuicios lo pensé después. Los que me conocéis bien sabéis que me emociono con facilidad, pues en ese momento estaba súper emocionado, dentro de una mezquita, nada turística, sentado al lado de un hombre que emanaba paz y energía, con unos ojos que parecían pozos de saber y que todo el que entraba o salía le mostraba su respeto. Iba vestido todo de blanco y el pañuelo que llevaba en la cabeza, tradicional aquí, era diferente a los que he visto hasta el momento, era de una tela vaporosa que le caía sobre los hombros y hacía resaltar más su tez cetrina y eso ojos tan mansos, tan en calma y a la vez con tanta fuerza. Debía tener cerca de 70 años, una larga barba blanca y un inglés perfecto. Mantuvimos una charla de unos 10 minutos, donde trato de explicarme (creo que el chico le había dicho que yo era católico) que su dios y el “mío” eran el mismo, que solo cambiaba el nombre y la manera de rezarle y adorarle. Me hizo algunas preguntas sobre lo devoto que era, y siguió hablándome de las similitudes de la religión. He de confesar que algunas partes no las entendí del todo, pero hizo hincapié en dos ideas: la verdad nos hará libres y que la religión siempre es un camino para la paz, que la gente que hace terrorismo no siguen el camino de la religión.

La verdad que fue un encuentro totalmente inesperado, diferente, en un entorno que no esperaba y hablando con un hombre con una energía increíble. Lo que decía antes es que sin conocer al hombre pero viendo un poco lo que pasa por estos lares es muy posible que luego este señor no respete demasiado a las mujeres, este de acuerdo en como se las trata aquí vulnerando sus derechos básicos, o le parezca bien como se trata aquí a los que no son árabes. Pero si no tenemos en cuenta eso (difícil, lo sé) el encuentro fue una pasada!

Pues para no alargarme más, que luego las cosas tan largas y sin fotos no se las lee nadie, decir que me despedí del señor y le di las gracias por su tiempo, que con la emoción del momento no fui capaz de retener su nombre en la memoria y que he decidido no salir demasiados días a hablar con los muchachos.

Cuando llegué donde estaba la mochila ya no había nadie pero la mochila estaba allí! :D

Suerte!